Cuando nosotros como docente desarrollamos actividades dentro del aula realizamos una panificación detallando los recursos, actividades y contenidos que abarcaremos. Esta planificación nos guía a lo largo del periodo de aplicación de la misma, optimizando tiempos y recursos en la labor docente.
Cuando realizamos esta
planificación llevamos a la vez otra planificación paralela, donde visualizamos
los recursos y herramientas que utilizaremos para esta actividad educativa.
Esta planificación tácita de recursos y herramientas que utilizaremos,
comprende los mismos aspectos que la planificación de la actividad pero con la
especificación y finalidad por la cual se utilizarán dichos recursos o
herramientas.
Aunque la planificación específica de las tecnologías educativas que utilizamos dentro del aula no se realiza físicamente, es necesario archivar las mismas, ya que este archivo nos ayudará a escoger en otras actividades las tecnologías que pudieran adecuarse a la actividad y mejorar los aprendizajes de los estudiantes según el contexto y contenido a desarrollar.
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